La Cinètika es un multicines con 10 salas recuperado por las vecinas y vecinos de San Andreu a inicios del mes de abril de 2016. Un espacio que hacía cinco años que estaba lleno de polvo a la espera de que las entidades bancarias que poseen el derecho de superficie y el Ayuntamiento de Barcelona, que es la propietaria del sol, se decidieran a habilitar un cine abierto al barrio. Cansadas de la espera el impulso popular ha abierto La Cinètika.
Desde Comsoc - Comunicació Social llevamos más de 4 años de trabajo intenso acompañando la experiencia de la comunidad de jornaleros y jornaleras vinculadas al Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT) que ocuparon la finca Somonte (Palma del Río, Córdoba). Elegimos la fecha del 17 de abril, el Día Internacional de la Lucha Campesina, para presentar "Somonte, los puños en la tierra".
Los días previos al estreno habilitamos la sala 4, la que en mejor estado conservaba la pantalla de cine y sus casi 130 butacas, y alquilamos un proyector digital para poder hacer el pase. Quitar el polvo, instalar el proyector en la sala de mandos y optimizar la imagen, habilitar las luces y sobre todo descubrir cómo activar el sonido de la sala, fueron algunos de los retos que realizamos a toda prisa pero con éxito, gracias a el esfuerzo colectivo de personas vinculadas a Telenoika, la Cinètika, y Comsoc - Comunicació Social.
Llega el día, y los fogones ya sacan fuego de buena mañana, una compañera prepara la comida popular vegano que acogerá a una treintena de personas con ganas de comer una fideuá, una ensalada y unos deliciosos pasteles. Acabamos de preparar la sala y el equipo de proyección. La Cinètika abre sus puertas a las 14h, y así comienza la jornada dedicada a la lucha por la tierra.
Acabamos de comer y las compañeras de Malamara soundsystem hacen resonar palabras de resistencia y rebeldía a ritmo de su rap combativo. Son las 16'30h y ya somos más de 80 personas preparadas para la doble estreno. Entramos en la sala 4 y compañeras del Comité de apoyo al Movimiento Sin Tierra de Brasil nos presentan uno de los movimientos sociales más importantes del continente americano y nos hablan de la importancia del 17 de abril, que denuncia la Masacre de Eldorado dos Carajás, donde la policía militar mató a 21 personas vinculadas al MST.
Impressionant veure 1 cinema abandonat tornar a la vida x servir al moviment popular. Sala plena amb @SomonteElDocu pic.twitter.com/z6QpTKeWbC
— La Cinètika (@LaCinetika) 17 d’abril de 2016
Son las 17h de la tarde y comienza el documental. Escuchamos a Lola Álvarez, Javier Ballesteros, y Paco "el Garaña", jornaleros que protagonizaron la primera ocupación de Somonte; Diego Cañamero y Óscar Reina, ex portavoz y portavoz del Sindicato Andaluz de Trabajadores respectivamente; Juan Manuel Sánchez Gordillo, Alcalde de Marinaleda; Enrique Priego, cura de Pedrera y compañero de Diamantino García; a Luna Rodríguez, Guillermo Contreras, y Pablo Jordá, del Comité de apoyo a Somonte. Todas estas voces, acompañadas de imágenes de la vida en Somonte y de la lucha por la tierra en Andalucía, nos dan una visión amplia sobre la ocupación de tierras más importante en Europa de los últimos años.
Tras la proyección fue el turno de un coloquio rico y participativo con las responsables del documental de "Somonte, los puños en la tierra". Destacar la participación de compañeros y compañeras que forman parte de colectivos como ASAC! - Alianza para la Soberanía Alimentaria de Cataluña, EdPAC - Educación para la Acción Crítica, del movimiento campesino de Paraguay que recuperaron las tierras de Curuguaty, del Observatorio DESC, de Lucha Internacionalista, de Rereguarda en Movimiento, de la Xarxa de Economía Solidaria (la XES), y de Metromuster, productora que ha colaborado con Comsoc - Comunicació Social para hacer posible este film que es fruto del esfuerzo colectivo de más de 200 personas a través de una campaña de micromecenazgo.
"Globalicemos la lucha, globalicemos la esperanza!" un grito de La Vía Campesina, fueron las últimas palabras de una jornada grabada en la memoria y enraizada a la tierra.